11 de mayo de 2013

Recuerdos

Recuerdo estos poemas cuando estudiaba en la academia con mis cuatro mejores amigas. Las cinco esperábamos impacientes las clases de literatura porque el PHD nos hacia amar y entender cada poema y cada verso de Maria Emilia Cornejo.
Recuerden conmigo loquitas...

 ...Te beso en los ojos, en la cóncava mudez de tu inocencia, 
te beso y todo tu cuerpo se viste con flores de un encanto primaveral,
te beso y conviertes las cosas en hechos silenciosos y llenos de asombro,
te beso al fin te beso...
 
...Debí seguir tus consejos, no leer más a Kafka ni frecuentar esos cafés que tú sí frecuentas; pero es tarde hace frío y estoy sola.

la soledad abrumadora de mis días se acrecienta en mis oídos hasta hacerlos estallar, ya nadie respeta mis decisiones; soy la hija extravagante y loca que hay que rescatar. entonces cada palabra mía se convierte en un grito desgarrador sin eco y sin respuesta.
 Me encontraste en la mitad de todos mis caminos y avanzaste lentamente hasta inundar todos los rincones de mi vida.
 Ahora, soy la mujer que sigue sigilosamente tus pasos la que aguarda en cada esquina tu llegada, 
soy la mujer incondicional que nada pide a cambio la que siempre te recibe (...),
soy la mujer, tu mujer, que guarda tus más gratos recuerdos; la que nunca olvidará tu nombre,
soy la mujer que conservará como un tesoro (...) tu desesperada forma de amarme. soy la mujer, tu mujer, y te amaré hasta entregarte toda mi piel...
...Sola, descubro que mi vida transcurrió perfectamente como tú lo estableciste.
Ahora cuando la sensación de algo inacabado, inacabado y ajeno invade de escrúpulos mis buenas intenciones, 
sólo ahora cuando me siento en la mitad de todos mis caminos atada a frases hechas a cosas que se hacen por haberlas aprendido como se aprende una lección de historia, puedo pensar que de nada sirvieron los consejos ni las interminables conversaciones con tu madre, y esas largas horas de mi vida perdidas en aprendizajes extraños sobre pesas y medidas, colores y sabores y en el vano intento de ir tras el sol tras el vuelo de los pájaros, de repente quiero acabar con mi baño de todas las mañanas, con el café pasado, con mi agenda cuidadosamente estructurada de citas y visitas a las que asisto puntualmente; pero es tarde hace frío y estoy sola..

Recuerdos de Maria Emilia Cornejo

Love!

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